... sin pecado concebida
El sacerdote le dio la absolución. Doña Blanca se había
acusado de mantener, a espaldas de su marido, un romance secreto con Tomasito y
no había escatimado detalles. Si le imponía una penitencia leve, puede que ella
intuyese que no la creía y lo que el cura deseaba era la felicidad de Doña
Blanca, aunque fuera tan solo en su más íntima fantasía.