Las fobias se mueven en el contorno difuso de su visión
periférica, aguardan el momento de aferrarse a los restos de su cordura, de
hundir los zarcillos en lo más profundo de su cerebro para alimentarse de
angustias y horrores. Una pesadilla en vida.
No ve la superficie de Marte desde
esa trinchera negra de frío intenso. No necesita las lecturas; la atmósfera es
apenas respirable. Lo sabían todos cuando firmaron.
Boquea en busca de aliento. Es el
último miembro de incontables generaciones de soldados. Ramb hace lo que
cualquiera de ellos hubiera afrontado en las mismas circunstancias: descorre el
cerrojo del arma para alojar los cartuchos.
Venderá cara su piel ante las
amazonas guerreras de la luna Fobos.
Microcuento para Gigantes de Liliput. Tema: Fobias.
Qué estupendo relato, habrá que cuidarse de las fobias.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y buscar las filias :) Gracias.
EliminarUn beso.
Un relato magnifico! Abrazos y besos:)
ResponderEliminarGracias, Linn. ¡Besos!
EliminarHas conseguido que una gran aventura quepa en un microrrelato.
ResponderEliminarQué bueno eres, paisa.
Y antes que necesitaba páginas y páginas... Lo que me estáis enseñando :)
EliminarUn besazo.